martes, 17 de mayo de 2011

Declaro




Cada segundo de mi piel ha sido rozado en algún momento por tu voz. Por tu aliento.

Tu, el ke siempre está, así no se vea. El clandestino, mejor amigo de mi soledad, mientras yo beso la suya.

Dejarte nunca ha estado en el presupuesto, tenerte nunca ha estado en las intensiones, guardar no más,

como la más valiosa de las fortunas, tu sonrisa borracha, tus pequeños ojos perdidos en los míos, las palabras más sinceras, las únicas que mis oídos conservan con devota agonía. Como el recuerdo que deja tu calor sobre mi piel, después del abrazo de protocolo social, apretando con fuerza y disimulo, esta fingida amistad a todas voces, eterno amor silencioso.



(Y... para qué hablarte, si puedo mirar esos ojos?)}



Te espero en el destierro.


1 comentarios:

Julia Posada dijo...
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