No love

A veces pienso que debería dejar de escribir de amor, esa cosa tan cliché. Todos lo hacemos, siempre lo mismo, ese sentimiento frustrante y doloroso, ese vaina que nos lleva de la grandeza a la miseria, de lo más sublime a lo más bajo, ese que solo termina bien en la películas.

Pero siempre, siempre, hay algo ke decir, precisamente pq el pecho solo no puede con esto. Ni el corazón, si es ke siente, ni el alma, ni el espíritu, si es ke existen, ni las lágrimas, ni las sonrisas.

El amor nunca ha sido honesto, siempre nos ha jugado malas pasadas, malos trucos, siempre ha sido un muy buen producto cinematográfico, el antagonista de la realidad, muy, pero muy poco sensato, y siempre mutando sus propias y absurdas reglas.

El mejor negocio! Para hacer canciones y poemas, postales, moteles, restaurantes, vehículos, libros, miles de ellos, contando historias de amor, de desamor, del amor perdido, del amor encontrado, del ke fue a primera vista, del ke nunk se dio, el ke se murió, y sin más remedio, ese ke dolió tanto, pero igual se fue.

El amor son los sueños rotos, las ilusiones efímeras, el mejor sexo!

Si el amor tuviera figura humana le rompería la cara! Por cobarde, por indeciso y dependiente, por que duele, SIEMPRE, duele.

Aunke, ante un corazón roto, tengo ke reprochar un cerebro incapaz. De manera pues ke tenemos la herramienta más poderosa en el universo, esa desagradable, pero sorprendente materia gris capaz de regalarle al mundo genios, teorías, FILOSOFÍA y no es capaz de controlar un simple órgano ke bombea sangre! Inaudito, paradójico y descarado.

Todo debería kedarse en el primer momento. El primer beso, las primeras palabras, esos días en ke todo es tan maravilloso ke estamos plenos y seguros, y ke se detenga el tiempo si le da gana, pero ke porfavor, no se detenga el amor.

Ke no se acabe, ke no mienta y si pretende hacerlo, entonces ke no se aparezca. Ke no juegue más con nosotros, ke estamos cansados de tanto llorar, ke suficiente hay con el mundo ke nos tocó, con este moribundo planeta lleno de plagas y malos momentos, ke ha falta de violencia, existe el desamor… y si no somos nosotros mismo ke nos damos esa fuerza, ke es la única ke nos mueve con tal magnitud, entonces, kién será? Ké será?

Deberíamos dejar de escribir de amor, para restarle importancia, para demostrarle ke no puede dominarnos, ke la mente es más fuerte, ke la razón siempre triunfa, ke somos científicos, no poetas… pero ke más da, la vida es poesía, estamos hechos para amar.